Esta es una traducción automática. Para ver el texto original en inglés
haga clic aquí
#Novedades de la industria
{{{sourceTextContent.title}}}
35°C: una temperatura que disuelve toda certeza
{{{sourceTextContent.subTitle}}}
La dilatación térmica: ¡un enemigo para sus ensayos de dureza!
{{{sourceTextContent.description}}}
Vayamos al grano: la dilatación térmica es un fenómeno que provoca un aumento del volumen del metal, estrictamente relacionado con el aumento de la temperatura.
Pero supongo que eso ya lo sabías.
Evidentemente, el coeficiente de dilatación térmica cambia, en base cambia de un metal a otro. Por ejemplo, el aluminio (72 X 10-6 °C-1 ) o el hierro y el acero (ambos 36 X 10-6 °C-1 ).
>>>¿Por qué es todo esto relevante para usted?
El durómetro es un instrumento que calcula en micras las dimensiones geométricas de la indentación (ya sea Vickers, Brinell o Rockwell). Por eso, la más mínima variación, tanto química como física, que se encuentre en las piezas metálicas del durómetro o incluso en la probeta que estamos probando podría invalidar toda la repetibilidad metrológica.
Por ejemplo, pensemos en los problemas que podría causar al soporte metálico del indentador o a diversas piezas metálicas de las que está hecho el soporte óptico.
>>¿Cuáles son los problemas tangibles que podemos experimentar, relacionados con el aumento de la temperatura?
Directamente, la indentación siempre resultará mayor y más profunda, debido al aumento tanto del diámetro/diagonal como de la altura de la indentación. Además, hay que tener en cuenta la alteración a la que se verá sometida la probeta, que también está relacionada con el coeficiente de dilatación térmica.
Por eso, en este caso no podemos hablar de repetibilidad de los valores de dureza.
>>¿Pero cómo se puede disminuir este error?
Haga clic a continuación para descubrirlo