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#Novedades de la industria
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Secretos para un durómetro duradero
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Mantenimiento y ajuste
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Apenas lo uso, ¡no necesito ningún control!
Lo mantengo muy bien, ¿qué podría pasar?
Por muy resistentes que parezcan, ¡los durómetros no son irrompibles ni eternos! Tanto el uso prolongado como el estado de inactividad pueden generar problemas que, si se subestiman, podrían comprometer la fiabilidad del instrumento en su uso.
Por ello, las normas internacionales recomiendan un mantenimiento y un ajuste periódicos. Concretamente, es la segunda parte de todas las normas ISO la que señala el calendario.
En general, estas dos comprobaciones deben realizarse cada 12 meses de conformidad con las normas. Sin embargo, el calendario se acorta cuando el durómetro se utiliza con frecuencia.
Si no se realizan estas comprobaciones, la fiabilidad y la calidad de los resultados de dureza no serán exactas. Para ser franco, ¡no es lo mejor para un instrumento que debe certificar parámetros de certeza en su producción!
El requisito para un buen uso de su durómetro a lo largo del tiempo es, por tanto, cuidarlo.
¡Se trata de un cuidado que no se improvisa!
Pero, ¿cuál es la diferencia entre ajuste y mantenimiento?
Hemos respondido a estas preguntas en el artículo que encontrará haciendo clic a continuación.
¡Hasta la vista!