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#Novedades de la industria
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Carga de oportunidades sin contacto para una producción y una logística totalmente automatizadas
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Cargador inalámbrico 3.0 de Conductix-Wampfler
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En septiembre de 2021, Conductix-Wampfler, uno de los principales fabricantes del mundo de sistemas de gestión de energía y datos para equipos móviles, presenta el cargador inalámbrico 3.0, una solución para cargar dispositivos de almacenamiento de energía que se basa en la transferencia de energía inductiva para permitir la carga de la batería sin contacto y de forma automatizada.
Los vehículos automatizados y sin conductor son cada vez más importantes en la producción y la logística modernas. Al mismo tiempo, los periodos de descanso de los vehículos están disminuyendo, ya que se utilizan continuamente debido al crecimiento global del comercio electrónico y a los ciclos de producción más rápidos. Aquí, la aplicación de la carga de oportunidad implementada en los procesos operativos ofrece una solución moderna para utilizar incluso pequeñas ventanas de tiempo para la carga inalámbrica e inductiva, por ejemplo, mientras se espera durante la carga. Además, es posible utilizar baterías más pequeñas y la vida útil de las celdas aumenta gracias a procesos de carga más rápidos y frecuentes que suponen una menor carga para las celdas. El cargador inalámbrico 3.0 de Conduxtix-Wampfler consta de sólo cuatro componentes básicos compactos. El sistema puede montarse en vertical y en horizontal y, por tanto, integrarse de forma flexible en los procesos de producción o almacenamiento ya existentes.
Gestión inteligente de la batería, diseño sofisticado
La pieza central del Wireless Charger 3.0 es el IPS (Inductive Power Supply) estacionario, que convierte la tensión de red en una tensión alterna de mayor frecuencia. El campo magnético así generado en el ISP (Inductive Stationary Pad), que se monta fijo en el suelo o en la pared, golpea sin contacto el IMP (Inductive Mobile Pad), que se encuentra en el vehículo, convirtiendo el campo magnético de nuevo en corriente. La corriente eléctrica se convierte en una tensión continua en la MPU (Mobile Power Unit) electrónica acoplada que carga la batería. Este sistema tiene numerosas ventajas: "El IPS está equipado con una pantalla de estado y se encarga del suministro de energía orientado a la demanda. Si la batería se carga de forma intermitente de forma regular y según la demanda, se evitan los posibles estados de carga mínima y máxima perjudiciales", explica Mathias Wechlin, director de productos de Conductix-Wampfler, y añade: "El cargador inalámbrico 3.0 no sufre desgaste mecánico y, en este sentido, no necesita mantenimiento. No hay superficies de contacto abiertas en las bobinas ni en las almohadillas; en cambio, están totalmente encapsuladas, por lo que están a salvo del contacto, y poseen una enorme robustez frente a las influencias ambientales." Al eliminar la abrasión mecánica, los cargadores inalámbricos también pueden utilizarse en zonas generalmente sensibles a la contaminación, como las áreas de producción limpia de las industrias farmacéutica o alimentaria. La alta eficiencia y el uso de componentes electrónicos de última generación hacen del cargador inalámbrico 3.0 una solución moderna para la logística automatizada del futuro.