Medición de carreras en cilindros hidráulicos – ¡Se acabó perforar el pistón!

Una pequeña revolución técnica

El sistema para la medición de carreras de cilindros SGH10 persigue, desde el punto de vista tecnológico, un enfoque completamente diferente al de los sistemas de medición que suelen encontrarse en el mercado basados en tecnología magnetoestrictiva, inductiva o Hall. A diferencia de estos sistemas, para la detección de la carrera se utiliza un mecanismo de cable montado directamente en el cilindro. El cable de este mecanismo se engancha en el cabezal del pistón. Si el cilindro se desplaza, se extraerá el cable que se encuentra enrollado en un tambor. La rotación generada de este modo en el tambor de cable quedará registrada por medio de sensores sin contacto y se transforma en un recorrido lineal. De este modo es posible detectar la posición exacta y absoluta del cilindro en todo momento. La electrónica activa palpa los imanes utilizados para el reconocimiento de la rotación, a través de la placa base resistente a la presión del SGH10. La electrónica se encuentra totalmente encapsulada en el lado sin presión del sistema. Por lo tanto, todo el sistema de medición está montado en el cilindro y, de este modo, protegido frente a las condiciones ambientales externas. Ventaja evidente: a diferencia de los sistemas de medición montados por fuera del cilindro, el sistema de sensores no puede resultar dañado por las piezas que se muevan a su alrededor o verse afectado o destruido por las factores ambientales.

La perforación del pistón se vuelve innecesaria

Otra revolución es la reducción de los costes de integración del sistema en el cilindro. Dado que, en los sistemas de medición convencionales, la varilla de sensores debía integrarse en el pistón a lo largo de toda la trayectoria de medición, a menudo se necesitaba realizar perforaciones largas y altamente precisas en el pistón. Esto no solo es caro, sino que también debilita la estructura del pistón. Con el sistema de medición de carreras SGH10, solo se necesita una pequeña rosca para enganchar el cable. Con esto, el sistema alcanza un potencial de ahorro considerable en términos de tiempos de producción y, en última instancia, del coste total de los cilindros hidráulicos. Cuanto mayor sea la longitud del recorrido, mayor será el potencial de ahorro económico. Y de esto se benefician fabricantes de cilindros, fabricantes de maquinaria y clientes finales, una situación en la que todos salen ganando.